La función de compras y la gestión de la cadena de suministro pueden aprender de la actual disrupción provocada por el Covid-19 y contribuir al fortalecimiento de sus operaciones.

Con más de un millón 793 mil casos de Covid-19 confirmados en todo el mundo, virtualmente no hay empresa que no haya resentido los impactos de la pandemia mundial. Al menos 94% de las compañías incluidas en la lista Fortune 1000 ya han experimentado interrupciones a consecuencia del virus. 
Ante la disrupción provocada por el coronavirus, numerosas empresas se han visto obligadas a desarrollar relaciones más colaborativas y resilientes con proveedores críticos. Las relaciones corporativas fuertes son clave para que cualquier organización pueda fortalecerse y hacer frente a cualquier tipo de interrupción.
Fortalecer las compras
Ante las medidas establecidas por los gobiernos del mundo para disminuir la propagación del nuevo coronavirus, las ventas en punto físico se han visto golpeadas de forma severa. La disrupción, sin embargo, ha sido respondida con el fortalecimiento de modelos operativos centrados en el cliente
Los restaurantes, por ejemplo, han virado a estrategias de entregas a domicilio o entregas de paquetes corporativos. Estas estrategias garantizan la operación y se han transformado en áreas de oportunidad para el funcionamiento de negocios. 
      Embed

Gestión de riesgos
La actual pandemia generada por el Covid-19 dejará grandes aprendizajes para las compañías del mundo. Por el momento, uno de los puntos críticos es analizar la exposición a la disrupción generada por la epidemia, a fin de tomar medidas para generar una cadena de suministro resiliente
Con el objetivo de tomar medidas inmediatas, es necesario realizar una gestión de riesgos exhaustiva que contemple todos los posibles factores de riesgo y determine posibles contingencias y sobrecostos. Se trata de desarrollar un plan de gestión de riesgos de la cadena de suministro.
De acuerdo con Gonzalo Fornos, director de Supply Chain Transformation de KPMG en España, en la gestión de riesgos de la cadena de suministro extendida, las áreas afectadas son:
  • La gestión y fidelización de la demanda (origen de la necesidad)
  • La gestión de proveedores
  • El transporte y la logística
  • La gestión de contratos
  • La gestión de inventarios
  • La gestión de la facturación y los pagos
  • El control presupuestario
La gestión de las compras y aprovisionamientos y la gestión de las operaciones deben actuar sobre las áreas mencionadas, además de contar con una visión del gasto end-to-end transparente, trazable e integrada en el plano del contrato del proveedor, del artículo y de la cadena de operaciones.
La estrategia inmediata, a corto y a mediano plazo incluiría: 
Ahora:
Comprender los riesgos clave en todas las operaciones y la cadena de suministro.
Movilizar equipos para gestionar en primer lugar la respuesta a la crisis y, en segundo lugar, centrarse en la evaluación de la cadena de suministro y la gestión de riesgos.
Evaluar si sus estructuras de gobierno corporativo son las adecuadas para tomar decisiones clave rápidamente.
Llevar a cabo una planificación de escenarios comerciales y financieros en los casos de 1) una recuperación rápida, 2) una desaceleración global, o 3) una posible recesión.
Corto plazo
Planificar acciones de mitigación de los riesgos en todas las operaciones y en la cadena de suministro, evaluando los impactos en el transporte marítimo, aéreo y terrestre.
Asegurar que las comunicaciones sean constantes con los principales clientes y stakeholders.
Revisar y evaluar el impacto en la planificación y gestión de las personas.
Revisar los impactos por fases de la cadena de valor según su sector.
Revisión de los contratos activos con proveedores críticos.
Continuo-medio plazo
Crear una cadena de suministro global ágil, resiliente y transparente
Comprender e implemente la automatización digital y de procesos para mitigar el impacto de la interrupción.
Desarrollar e implementar prácticas mejoradas de gestión de la relación con los proveedores, diferenciando los más críticos para desarrollar con ellos estrategias de colaboración más intensas.
Desarrollar iniciativas de mejora de la gestión de riesgos y de la cadena de suministro.
Replanteamiento de las estrategias de make or buy y de re shoring (fabricación en casa)
Mayor alineamiento con áreas financieras para el cuidado de la caja a través de la gestión eficiente de inventarios y condiciones de pago.
Fuente: KPMG.